
Morelia rinde homenaje a Benito Juárez
Como cada año, el 21 de marzo pasado se conmemoró en Morelia el natalicio de don Benito Juárez, mediante un acto cívico ante el monumento del héroe que se levanta a un costado de la catedral, al cual asistieron autoridades civiles, militares y educativas. En la alocución oficial se recordó la vida y la obra trascendental de uno de los personajes más importantes de la historia de México. Al término del evento se colocó una ofrenda floral y se montó una guardia de honor.
Con este acto la capital michoacana se unió al festejo nacional cuya fecha está marcada en el calendario cívico como una de las más relevantes, con suspensión de labores e izamiento de bandera a toda asta en todos los edificios públicos.
Benito Juárez nació el 21 de marzo de 1806 en el pueblo de San Pablo Guelatao, Estado de Oaxaca, en el seno de una familia indígena zapoteca. A los 12 años, se trasladó a la ciudad de Oaxaca donde pronto dio muestras de aplicación e inteligencia por lo que fue protegido y apoyado por el encuadernador don Antonio Salanueva para realizar estudios de primeras letras y continuar su educación en el seminario, institución que dejó para seguir la carrera de abogado en el Instituto de Ciencias y Artes de la misma ciudad.
Incursionó en la política adhiriéndose al grupo de los liberales e integrándose al partido yorkino de la masonería, cuyos miembros estaban inmiscuidos en la vida política de México desde la consumación de la independencia. Así, Benito Juárez llegó a ser regidor del Ayuntamiento, diputado y gobernador de Oaxaca, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y Presidente de la República desde 1858 hasta su muerte el 18 de julio de 1872.
Participó en la Revolución de Ayutla para derrocar al dictador Santa Anna. El triunfo de los liberales impulsó la elaboración y promulgación de la Constitución de 1857, así como las Leyes de Reforma, de carácter económico, político, administrativo y religioso, en parte inspiradas en los Estados Unidos, expedidas para promover la igualdad de derechos y obligaciones de los ciudadanos, sin privilegios ni distinciones, la libre circulación de una gran parte de la propiedad raíz -que los liberales consideraban la base de la riqueza pública y del progreso-, y la separación de la Iglesia y el Estado para conformar un estado laico, es decir, donde solo existiera la autoridad civil; medidas que afectaron a la Iglesia Católica, a los militares, a las corporaciones religiosas y civiles, y a las comunidades indígenas.
Entre las leyes más importantes promulgadas por el gobierno de Benito Juárez se encuentran:
- Ley de nacionalización de los bienes eclesiásticos.
- Leyes del Registro Civil, (hasta entonces la Iglesia era la encargada de registrar a las personas mediante el bautismo, el matrimonio y las defunciones)
- Ley de la libertad de cultos (hasta entonces la religión católica era la única permitida)
- Decreto de creación de cementerios civiles
- Decreto de secularización de hospitales y establecimientos de beneficencia
- Decreto de extinción de los conventos y órdenes religiosas
Previamente, se había expedido la ley que regulaba la libertad de prensa, y Miguel Lerdo de Tejada, ministro de Hacienda, había logrado que se aprobara la Ley de Desamortización de las fincas rústicas y urbanas propiedad de las corporaciones civiles y eclesiásticas.
La oposición de la Iglesia y de los grupos conservadores a la nueva constitución y a las nuevas leyes y decretos, desencadenó la Guerra de Reforma, que duró tres años y culminó con el triunfo de los liberales, a la que siguió la guerra de Intervención Francesa y el Imperio de Maximiliano de Habsburgo, en un intento más de los conservadores por mantener sus privilegios.
Juárez defendió siempre la República frente al Imperio, apoyado por varios de sus colaboradores y gran parte de la población. Ante el avance del ejército imperialista, fue obligado a desplazar su gobierno hacia el norte: San Luis Potosí, Chihuahua, hasta Paso del Norte, a orillas del río Bravo, en la frontera con Estados Unidos.
Mediante la guerra de guerrillas los republicanos fueron recuperando terreno poco a poco replegando a las fuerzas imperialistas hasta su derrota total en Querétaro el 15 de mayo de 1867 y concluyó con el fusilamiento de Maximiliano, Miramón y Mejía en el cerro de las Campanas.
Juárez entró victorioso en la ciudad de México, pronunciando en su discurso de restauración de la república, su famosa frase: “Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la Paz”.
Morelia ha rendido homenaje a don Benito Juárez de diversas maneras, con el ánimo de difundir y mantener en la memoria colectiva las acciones que marcaron un cambio en el derrotero de la historia mexicana y que configuraron las características que aún perviven en el régimen de la nación. Sin duda, es uno de los personajes de nuestra historia que más se recuerda y evoca.
Monumento
En 1961, por iniciativa del gobernador del Estado, Lic. David Franco Rodríguez, se destinó un espacio al oriente de la Plaza de Armas (donde antes había estado un monumento a Morelos), para conformar una pequeña explanada de forma rectangular en honor a don Benito Juárez, levantándose en el extremo sur un monumento con una escultura del Benemérito de las Américas, que fue inaugurado en julio del siguiente año por el presidente de la república el Lic. Adolfo López Mateos y el gobernador.
La escultura es de bronce y representa a don Benito de pie, vestido a la usanza de la época del siglo XIX, chaqueta larga, pantalón, chaleco, camisa de cuello alto y corbata de moño. Muestra su rostro característico de rasgos indígenas zapotecos, cabeza en alto, mirada al frente y con una expresión altiva, firme y decidida. Es el Juárez triunfante que se muestra en un alto pedestal de cantera en cuyo frente ostenta en letras doradas el nombre de JUAREZ con una palma y una rama de encino, símbolos de victoria y fortaleza de la república.
En la parte posterior del pedestal se colocaron dos placas metálicas con inscripciones. Una es la que da fe de la inauguración de la plaza:
PLAZA PRESIDENTE JUAREZ
SE CONSTRUYÓ POR EL GOBIERNO DEL ESTADO
Y SE INAUGURÓ POR EL CIUDADANO
LIC. ADOLFO LOPEZ MATEOS,
PRESIDENTE CONSTITUCIONAL DE LA REPUBLICA
DURANTE LA GESTION ADMINISTRATIVA DEL C.
LIC. DAVID FRANCO RODRIGUEZ.
JULIO DE 1962.
La otra placa se colocó con motivo del bicentenario del natalicio de Juárez y fue auspiciada por las logias masónicas, como atestigua su inscripción rubricada por tres puntos:
2006, AÑO DEL BICENTENARIO DEL
NATALICIO DEL BENEMERITO DE LAS
AMERICAS
DON BENITO JUAREZ GARCIA
COMO TESTIMONIO DE
ADMIRACIÓN, GRATITUD
Y RESPETO
EL PUEBLO DE MICHOACAN.
MORELIA, MICHOACAN DE OCAMPO.
A 21 DE MARZO DEL 2006:.
Se acompaña de un busto del héroe en relieve dorado, acompañado de una rama de laurel y el águila republicana, con las frases que compendian sus acciones y logros más connotados: “CONSTITUCION 1857”, “LEYES DE REFORMA”, “EL RESPETO AL DERECHO AJENO ES LA PAZ”.
La estatua es obra del escultor Francisco Zúñiga, como se registra en la base de la misma: “F. ZUÑIGA – 61”. Este artista nació en San José de Costa Rica el 27 de diciembre de 1912. Estudió dibujo y escultura en la Escuela de Bellas Artes de su ciudad natal, donde cosechó los primeros triunfos en su larga y prolífica trayectoria artística. En 1936 llegó a México, país en el que se quedó a radicar definitivamente y donde desarrolló una importante carrera con obras que se distinguen por un estilo nacionalista monumental de sólidas figuras que exaltan la temática indigenista y las formas prehispánicas; entre las más importantes se encuentran las que realizó para el Monumento a la Revolución y las que le encargaron para la Secretaría de Comunicaciones, en la ciudad de México. Manejó magistralmente el bronce, la madera, la piedra, el mármol y el ónix. Sus obras se han expuesto ampliamente en México y en el extranjero. Recibió múltiples reconocimientos, entre los que destaca el Premio Nacional de Ciencias y Artes, en el ramo de Bellas Artes, en 1992. Falleció en la ciudad de México el 9 de agosto de 1998.
En 1961, cuando se decidió levantar el monumento a Juárez, Francisco Zúñiga era ya un artista reconocido y destacaba por su obra de marcado nacionalismo indígena, por lo que se le consideró el artista apropiado para realizar la escultura del héroe mexicano de origen zapoteca, la cual recreó de manera magistral, basándose seguramente en retratos fotográficos. Del mismo artista, Morelia cuenta con la escultura de Cuauhtémoc que se levanta en el bosque dedicado al último emperador mexica, y en Pátzcuaro con la de don Vasco de Quiroga, en el centro de la plaza principal de esa ciudad, erigida en 1965 con motivo del cuarto centenario de la muerte del primer obispo de Michoacán.
Además del monumento, Morelia ha enaltecido a Benito Juárez, otorgándole su nombre a una calle, una colonia, una avenida y un parque.
Calle Benito Juárez
Es una de las calles principales del Centro Histórico de la ciudad, nada menos que la que se despliega al frente de la catedral, de sur a norte; de manera que la fachada del templo máximo moreliano sirve de hermoso y lucido remate visual a esta vía, donde además encontramos varios edificios relevantes, como la fachada lateral del Palacio de Gobierno, que ocupa toda una cuadra de admirable armonía y simetría de sus elementos arquitectónicos, todo en piedra labrada; en la siguiente cuadra se ubican algunas de las grandes casonas típicas morelianas, perfectamente conservadas en su estilo colonial; en la siguiente esquina vemos lo que fue el Palacio Episcopal en el siglo XVIII, ocupado hoy por la Secretaría de Salud del Estado, y en seguida el Museo de Arte Colonial, donde estuvo la primera imprenta de la ciudad, en el siglo XIX. Finalmente se halla al conjunto monumental del Carmen, con su plaza, atrio, iglesia y antiguo convento.
Colonia Juárez
Colinda con el centro histórico, por el rumbo del sur. Es una de las primeras colonias de Morelia, en forma de un gran cuadrilátero, cuyas amplias y rectas calles y manzanas cuadradas continúan con el trazo geométrico regular tradicional de la antigua Valladolid. Su parroquia del Salvador del Mundo, es famosa por la tradicional representación en vivo de las Tres Caídas, implementada por el sacerdote de grata memoria, don José Zavala Paz, desde el año de 1960.
Calzada Juárez
Es una de las avenidas más importantes de la ciudad y la más bella -después de la Avenida Madero-, y le ha dado una imagen de modernidad por su anchura, longitud y elementos de ornato. Fue proyectada y trazada por el rumbo del sur a fines del siglo XIX, junto con una amplia zona arbolada y un lago artificial al final de la misma, para que sirviera de paseo, solaz y esparcimiento a la población, que hasta entonces solo contaba con el bosque y la calzada de San Diego.
Esta calzada parte de la plazuela de Carrillo, en los límites del Centro Histórico, y siguió el trazo de la antigua salida a Pátzcuaro, conocida en la época colonial como garita de Santa Catarina, por encontrarse cerca una capilla dedicada a Santa Catalina de Alejandría. La garita, -que estuvo arbolada desde el siglo XVIII-, se amplió y se continuó su trazo recto hasta topar con la loma de Santa María. En su culminación se creó una rotonda, con un kiosco en el centro para audiciones musicales.
Calzada y parque Juárez en 1898
Detalle del plano de Morelia publicado en el libro Pueblos, Villas y Ciudades de Michoacán en el Porfiriato, Gerardo Sánchez Díaz (Coord.), Morelia, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Instituto de Investigaciones Históricas, 1991, p. 102.
Para 1905 contamos con una breve pero sustanciosa y amena descripción de esta calzada y su entorno, por el Lic. Mariano de Jesús Torres:
Por la ex-garita del sur, llamada antiguamente de Santa Catarina, rompe una amplia calzada, bien empedrada y con pasamano de cantera hacia uno y otro lado, que atraviesa el llano de Santa María y va a terminar al pie de la loma, donde con el plantío de árboles que anualmente se verifica, se ha formado un parque al que se le dio el nombre del ciudadano Benito Juárez que fue Presidente de la República, y por eso se denomina Parque Juárez. Para embellecerlo, se le puso un kiosco donde se sitúa la música que va a dar allí audiciones públicas, y a cuyo derredor hay espacio suficiente para los carruajes. Se formó hacia la derecha un pintoresco laguito donde bogan varias chalupas, pertenecientes a una empresa particular, y donde por módico precio se pasean los circunstantes. En el ribazo de la loma se ha edificado una bonita casa donde se hacen festines oficiales y particulares. Un tranvía que parte de la calle contigua a la Nacional, frente al templo de la Compañía, corre diariamente a horas determinadas y llega al mencionado parque, que se ve muy concurrido, especialmente los domingos y días festivos; allí encuentran los concurrentes, cantinas, vendimias, etc.
En la actualidad es uno de los paseos de moda, y es muy atractivo por el bellísimo panorama que presenta Morelia desde la cuesta y loma de Santa María, a cuyo pie está el parque.
(Mariano de Jesús Torres, Historia civil y eclesiástica de Michoacán, 1ª. Parte, Morelia, Imprenta del Autor, 1905, pp. 706-707)
Hacia 1930, se eliminó el kiosco de la rotonda y se agregaron esculturas de los héroes de la Reforma y el águila con la serpiente del escudo nacional.
Las esculturas desaparecieron con el tiempo -y con ello se perdió la unidad iconográfica y simbólica de la avenida- y en su lugar se creó una fuente a la que hace poco se le volvió a incorporar el águila. Hoy día la avenida remata con las estelas escultóricas de las constituciones de México, promulgadas en 1814, 1857 y 1917, de la autoría de Alfredo Zalce, reconocido artista michoacano, nacido en Pátzcuaro y radicado en Morelia durante muchos años.
La calzada se distingue por las instituciones educativas que se han ubicado a lo largo de su trayecto. Así encontramos el Centro Educativo Independencia, de nivel primaria; el jardín de niños “Niños Héroes de Chapultepec”; la primaria “Madero y Pino Suárez”; la Escuela Técnica Industrial No. 3 "Álvaro Obregón”; y la Secundaria No. 2 “Hnos. Flores Magón”. Aquí también se encuentran algunas dependencias del gobierno del Estado y el Instituto Michoacano de Ciencias de la Educación “Morelos”. De manera que esta avenida tiene gran animación estudiantil y de padres de familia que aprovechan el espacio peatonal -que justifica el nombre de calzada- para disfrutar de un agradable paseo, a pesar de una ciclo-pista de reciente intromisión.
Contribuye a la belleza de esta avenida la ausencia de anuncios comerciales espectaculares, que tanto han denigrado la imagen urbana de la Morelia moderna.
Parque Zoológico Benito Juárez
Al finalizar la calzada, se encuentra la entrada al Parque Zoológico, inaugurado en 1970 por el gobernador Carlos Gálvez Betancourt. Es considerado como uno de los zoológicos más importantes de México por el número y variedad de animales en exhibición. Se aprovechó el área arbolada del antiguo parque, de 25 hectáreas de extensión, con lo que se despojó a la población moreliana de un espacio verde de esparcimiento del que había gozado gratuitamente durante casi cien años.